En un bosque a las afueras de Madrid vivía una familia muy pobre en una cabaña de madera. Allí no vivía nadie más ,solo ellos, pero de vez en cuando iba gente a acampar. La familia estaba compuesta por cuatro miembros: el padre Lucas, la madre Carlota y los dos gemelos Marco y Dilan.
Una mañana, los dos niños, Marco y Dilan salieron a jugar por detrás de la cabaña donde había un patio enorme, de repente, escucharon un ruido de una moto y se asustaron tanto que entraron por la puerta trasera que daba a la cocina. Cuando entraron, estaba su madre recogiendo la cocina y su padre en el comedor leyendo el periódico. Los niños fueron corriendo a contarle a sus padres lo que había ocurrido. Cuando se lo estaban contando, justo en ese momento, tocaron el timbre, su madre se levantó y abrió la puerta, era un chico joven de pelo castaño, ojos claros, alto y muy guapo. El chico le preguntó a Carlota si era ella su madre. Carlota se quedó sorprendida al escuchar aquello, pero vio el parecido que tenían los dos. Su marido Lucas se acercó a la puerta y le invitó a pasar al chico, sin saber lo que estaba pasando ,cerró la puerta mientras que Carlota iba a la cocina a por un vaso de agua para aliviar el susto. Cuando estaban todos sentados en el salón, incluido el chico tan guapo llamado Sergio, volvió a preguntar en alto, ahora incluyendo al padre, ¿ustedes son mis padres? Se quedaron todos callados pero el chico no ,y volvió a preguntar: ¿ustedes son mi familia?, el padre Lucas dijo: ¿por qué nos preguntas ésto? El chico empezó a explicar que hacía seis meses, ya había cumplido los 18 años y que desde los tres días de haber nacido había estado viviendo todos estos años en un centro de menores porque supuestamente sus padres lo habían abandonado. Carlota dijo: “si es verdad que yo di a luz hace ya dieciocho años a un bebé pero nos habían dicho poco después de haberlo tenido que había muerto”. Sergio dijo:” pues no estoy muerto, les mintieron, y estoy casi seguro de que mis padres son ustedes, sobre todo porque llevo seis meses buscándolos hasta que por fin los encontré ,así que no me pienso dar por vencido, si a ustedes les parece bien, me gustaría hacerme una prueba de ADN. Lucas y Carlota aceptaron sin averiguar fechas ni nada, pero por el parecido que tenían y por lo que les decía su corazón, aceptaron. Sergio les pidió un favor , que si se podía quedar a dormir en su casa hasta que se resolviera todo. Lucas y Carlota le dijeron que sí. Los niños Marco y Dilan que había escuchado todo, no entendían nada pero prefirieron no preguntar.
A la mañana siguiente Lucas y Sergio fueron a una clínica a hacerse las pruebas, al terminar de hacérselas les dijeron que tardarían dos días en llegarle los resultados. Cuando llegaron a la casa, estaban muy nerviosos y tenían muchas ganas de que fuese ya ese día.
El día que llegaban las pruebas, por la mañana en el dormitorio de los padres, se acababan de despertar y como todas las mañanas, se pusieron a hablar de cómo les había ido estos días y lo que les había cambiado desde que vino Sergio.Carlota le dijo a su marido Lucas que ojalá Sergio fuera su hijo tras ver lo bien que se lo pasaba jugando con sus supuestos hermanos pequeños. Esa mañana en el desayuno todos estaban muy callados y nerviosos, al terminar de desayunar ,todos se sentaron muy ansiosos a esperar en el sillón, hasta los más pequeños de la casa, y eso era raro,ya que estaban siempre jugando. A las 12:30 de la mañana tocaron el timbre,se levantaron todos corriendo y abrieron la puerta muy nerviosos ,era el mensajero que traía un sobre grande a nombre del padre Lucas. Por fuera del sobre se podía leer ,Clínica de estudio ADN ,cuando firmó el recibo, cerró la puerta y se sentó con todos en el sillón. Antes de abrir el sobre ,la madre Carlota dijo: seas o no nuestro hijo, estos tres días que has pasado aquí, han sido inolvidables. Dicho esto, Lucas abrió el sobre y fue directamente a leer la parte de abajo que decía: Prueba de paternidad “POSITIVA”.
Se levantaron todos corriendo y se dieron un abrazo todos juntos mientras la madre Carlota decía: “bienvenido a la familia Sergio…”
AUTORA: CAROLINA GARCÍA CASTELLANO. 1º ESO B